Perspectiva de la industria de seguros para 2022: Transformación digital acelera a medida que las aseguradoras se adaptan al crecimiento pospandémico

En 2021 se produjo el despliegue generalizado de vacunas y la flexibilización de las restricciones relacionadas con la pandemia, catalizadores importantes que ayudaron a reconstruir la confianza entre las personas y las empresas por igual, al tiempo que impulsaron la recuperación económica. Pero la batalla con COVID-19 está lejos de terminar, y es probable que persista un nivel de incertidumbre, quizás indefinidamente. ¿Podría esto socavar las perspectivas de la industria de seguros de cara al 2022? Nuestra investigación encontró que a pesar de las preocupaciones actuales sobre el COVID-19, las aseguradoras en general esperan un crecimiento más rápido el próximo año, aunque los desafíos no pandémicos en torno a la regulación, el talento, la sostenibilidad y las preferencias cambiantes de los consumidores pueden presentar obstáculos. Mucho dependerá de la eficacia con la que las aseguradoras gestionen sus inversiones en personas y tecnologías emergentes. Los modelos de trabajo flexibles, equilibrar la automatización con la necesidad de mantener un contacto humano con los clientes y ser más proactivo en el fortalecimiento de la confianza de las partes interesadas deben estar entre las prioridades estratégicas de la industria.

Estos son algunos de los hallazgos clave de las perspectivas de la industria de seguros para 2022 de Deloitte.

Las aseguradoras están abrochadas para acelerar el crecimiento en 2022

A pesar de las preocupaciones persistentes sobre las variantes de COVID-19, la mayoría de las aseguradoras esperan una recuperación económica acelerada e inversiones adicionales en tecnología digital en 2022. Aproximadamente un tercio de los encuestados esperan que los ingresos sean “significativamente mejores” el próximo año. Se espera que la demanda de seguros siga aumentando en todo el mundo (figura 1).



Sin embargo, el viaje podría ser accidentado

Los desafíos que enfrentan las aseguradoras van desde obstáculos económicos como el potencial de una inflación sostenida; a las preocupaciones de sostenibilidad, incluido el riesgo climático, la diversidad y la inclusión financiera; a las preferencias de compra y de productos de consumo en rápida evolución.

Atraer (y retener) talento en un entorno de trabajo híbrido en evolución será clave

Las consideraciones sobre el futuro del trabajo también se han multiplicado a medida que los operadores buscan crear estrategias flexibles de regreso a la oficina mientras, al mismo tiempo, luchan por retener y reclutar talentos de alto nivel en un mercado laboral muy competitivo, particularmente para aquellos con tecnología avanzada y habilidades de análisis de datos.

Las aseguradoras deben encontrar formas de equilibrar la adopción de tecnología con el mantenimiento del toque humano

Las aseguradoras dependen cada vez más de las tecnologías emergentes y las fuentes de datos para impulsar la eficiencia, mejorar la ciberseguridad y ampliar las capacidades en toda la organización. Sin embargo, la mayoría también debería centrarse en mejorar la experiencia del cliente mediante la optimización de los procesos con la automatización y la prestación de un servicio personalizado donde sea necesario y preferido.

Con la pandemia han surgido oportunidades para impulsar la confianza de las partes interesadas

En un nivel más fundamental, muchos operadores pueden considerar tomar medidas para reforzar la confianza entre las partes interesadas para aumentar la retención y la rentabilidad. Esto podría lograrse en parte mediante una mayor transparencia en la forma en que las aseguradoras recopilan y utilizan los datos personales. También pueden volverse más proactivos en la búsqueda de soluciones integrales para problemas sociales de panorama general, como mitigar el impacto financiero de futuras pandemias y cerrar las brechas de cobertura para catástrofes naturales.