Santo Domingo, R.D. Mayo 10, 2022.- El politólogo y experto en seguridad ciudadana, Daniel Pou Suazo, afirmó que ha advertido que la Policía Nacional no está capacitada para intervenir en casos donde se encuentren personas especiales o con crisis psiquiátricas, bajo los efectos de drogas, alcohol u otras sustancias que alteren la conducta humana.
Pou Suazo informó que desde hace años viene proponiendo que el proceso de capacitación de los miembros de la institución del orden incluya el entrenamiento para dichos casos y que existan cárceles en los recintos para las personas detenidas que presenten conductas fuera de lo normal, pero con todos los protocolos que hay diseñados para tales fines.
“Lamentablemente en una celda de un destacamento a veces se mezclan mujeres con hombres, niños con adultos, delincuentes de alta peligrosidad con personas que han infringido algunas leyes del país, que puede ser hasta de tránsito”, expresó al ser entrevistado en el programa Toque Final con Julio Martínez Pozo que se transmite por Antena 7.
Dijo que las personas detenidas son expuestas a compartir con individuos que suelen ser violentos y tener un historial delictivo sumamente dilatado.
El experto en seguridad ciudadana deploró el hecho de que la República Dominicana durante décadas ha preferido tener una Policía Nacional «cenicienta», sumida en una situación de servidumbre, donde la capacitación, preparación y evaluación de las personas que deben integrar el cuerpo del orden no son elementos sustentables ni tomados en cuenta al momento de ser incorporados.
Precisó, además, que la dignificación de la carrera policial es el primer pilar que debe ostentar cualquier proceso de transformación de la institución. “Yo no hablo de reforma policial, porque se reforma lo que funciona con algún defecto, hablo de transformación”, expresó.
Afirmó que la institución del orden desde hace muchas décadas ha abandonado sus preceptos misionales y por tanto, no responde a las necesidades de la población.
Pou Suazo cree que el cuerpo del orden no puede convertirse en un ariete de una política pública de seguridad ciudadana, primero porque sus miembros no están en capacidad y segundo porque la imagen que tiene la población de la Policía Nacional es deplorable.
Indicó que entre las metas fundamentales que tiene que garantizar un proceso de transformación de la Policía están la confianza mutua y la transparencia, para lo cual se requiere dinero porque a su entender, no se logra sólo con retórica teórica e intelectual, sino que hay que dignificar la vida de los policías.
“No podemos seguir teniendo personas excluidas con uniforme de policías que cuando se ven frente a un ciudadano digno y serio viertan sobre este todo su resentimiento, porque son oprimidos, no se les respeta y se les trata como una servidumbre en la institución donde laboran”, manifestó Pou Suazo.
Aseguró que los policías no se sienten parte ni comprometidos con ningún cuerpo porque a esa institución hace mucho se le drenó el espíritu de cuerpo.
Hizo un llamado a las autoridades a invertir en la Policía, en capacitación y dignificación porque vale la pena, hoy más que nunca.