Ha llegado septiembre y con él la “vuelta al cole” de muchos niños y niñas, pero también a los centros de enseñanza de idiomas, de extraescolares, universitarios y un largo etcétera. Con el estado de pandemia actual, preocupa que pueda haber nuevos contagios y que debido a los rebrotes se tengan que cerrar los centros. Disponer de un sistema que garantice la eliminación de virus y bacterias es, por tanto, una prioridad en los centros educativos, restaurantes y espacios cerrados.
El sistema BioZone actúa sobre aire y superficies y destruye el ADN de los organismos perjudiciales para las personas, además de eliminar mohos y malos olores sin utilizar químicos, por lo que se convierte en una solución asequible y necesaria para garantizar la máxima limpieza en cualquier espacio interior. En menos de una semana centenares de jóvenes y pequeños volverán después de muchos meses a los colegios, universidades y escuelas infantiles. Y no solo eso, sino que también realizarán actividades extraescolares, como danza, inglés, deporte o música, y la COVID-19 sigue preocupando, ya que las aulas a veces no disponen de sistemas de ventilación que garanticen la renovación del aire y existen pruebas contundentes de que la falta de calidad de éste en el interior daña la salud de numerosas formas.
La calidad del aire que respiramos se puede calcular con la tasa de intercambio de aire, que indica el número de veces que el mismo es reemplazado en una hora y dentro de un edificio con el de fuera. Esta tasa depende siempre del tamaño del espacio interior y del número de personas que lo ocupan. La mayoría de los expertos considera que un ritmo de seis ciclos de cambio completos por hora es adecuado para una habitación de 3 x 3 metros en la que hay tres o cuatro personas. Y en tiempos de pandemia, esta tasa debe ser mayor.
Por ello, un purificador de aire es una garantía añadida para mantener el aire limpio y libre de bacterias y virus que conviven con nosotros cada día. BioZone presenta por primera vez en España una nueva tecnología basada en el plasma de oxígeno frío, probada y certificada por el Laboratorio Nacional Francés contra el virus H5N1 (gripe aviar) y SARS-CoV-1 (coronavirus 2002) y avalada con estudios científicos que confirman que elimina también la COVID-19 cuando éste está en contacto directo con la luz UVC del dispositivo. Además, BioZone es respetuoso con el medio ambiente al no usar desinfectantes químicos y tener un consumo equivalente a una bombilla de 15W.
Es indispensable contar con un purificador de aire en establecimientos públicos cerrados, no solamente escuelas y universidades, sino también oficinas, restaurantes y hoteles. El nuevo Hotel Four Seasons de Madrid, por ejemplo, ya cuenta con el nuevo sistema de purificación de aire de BioZone.