Tecnologías como el blockchain, la impresión 3D, las aplicaciones móviles, la inteligencia artificial o la robótica están contribuyendo a luchar contra la pandemia. También a minimizar su impacto en la actividad empresarial. El informe publicado por Grant Thornton identifica las que más han aportado hasta ahora a la lucha contra el coronavirus.
Así, el 53% de las iniciativas innovadoras desplegadas para esa finalidad han recurrido al big data y a la inteligencia artificial. El 22% se han basado en la robótica y el 12% a la ciberseguridad. En tercer y cuarto lugar se sitúan el blockchain (11%) y los chatbots (2%).
La consultora apunta a países como China o Corea del Sur como las referencias en ese uso de la tecnología para combatir el virus. Por ejemplo, el software de GPS chino BeiDou ha permitido a las autoridades del país enviar mensajes de alerta a 6 millones de vehículos. También orientar a drones y robots que han entregado equipamientos médicos y material sanitario en áreas remotas.
Otro ejemplo: la compañía CloudMinds ha desplegado 100 robots en hospitales de todo el país. Uno de ellos ha estado en el epicentro de la pandemia, en Wuhan, operado íntegramente por máquinas.
Además, la tecnología de toma de temperatura mediante infrarrojos de Baidu está permitiendo examinar a 200 personas por minuto en la estación de Qinghe, en Pekín. Se evita asó el colapso de sus instalaciones.
Principales usos de la tecnología
La tecnología blockchain, por ejemplo, permite una mejor gestión del material sanitario al garantizar la trazabilidad de su cadena de suministro. Esta función habría reducido la incertidumbre y vuelto más transparente el proceso de abastecimiento. También permite reducir la propagación de bulos, al permitir la trazabilidad del origen de las noticias.
La impresión 3D, por su parte, permite un abastecimiento rápido y asequible de los hospitales. Lo demuestra la producción de respiradores en tres horas por solo 100 euros, en contraste con su precio de mercado, que supera a menudo los 15.000.
Las aplicaciones móviles de telemedicina, en tercer lugar, están utilizándose en muchos países para evitar el colapso de sus teléfonos de emergencias.
Grant Thornton apunta también a la geolocalización como a una tecnología que puede ponerse al servicio de un mejor control de los infectados por el coronavirus y de sus respectivas cuarentenas. Lo hace de la mano de sistemas de información geográfica que no solo cumplen una función de supervisión, sino que recopilan también datos para predecir tendencias.
La inteligencia artificial es otra innovación con múltiples usos en la lucha contra el Covid-19. Por ejemplo, la detección temprana de infectados, el diagnóstico rápido o el seguimiento de tratamientos. La combinación de sistemas de videovigilancia y cámaras térmicas asistidas por IA permiten tomar la temperatura. De igual manera se puede detectar a las personas que no llevan mascarilla en estaciones de metro o de tren Las herramientas diagnósticas basadas en inteligencia artificial pueden determinar si alguien ha contraído o no la enfermedad en entre 15 y 20 segundos con un grado de exactitud del 96%.
Por último, los drones y robots permiten el control remoto de la población Cabe recordar, por ejemplo a los ciudadanos que deben permanecer en sus casas, pulverizar desinfectantes en zonas afectadas o interactuar directamente con pacientes de hospitales en la entrega de alimentos y medicinas o desinfectando habitaciones, salas de espera y pasillos mediante rayos ultravioleta para reducir el contagio del personal sanitario.