La dificultad en Bolivia para realizar pruebas para detectar el nuevo coronavirus y el dotar ventiladores mecánicos a los hospitales en Colombia marcaban otra jornada en Latinoamérica en la lucha para evitar que la pandemia se salga de sus manos.
Mientras tanto, en Chile crecía la polémica sobre si los funcionarios gubernamentales deben volver o no a retomar sus actividades presenciales en los próximos días como esperan las autoridades.
El gobierno boliviano reconoció el domingo que desde que se detectó el primer caso del nuevo coronavirus en el país andino hace casi un mes sólo se realizaron 3.900 pruebas de diagnóstico debido a la carencia de laboratorios. La enfermedad ha infectado hasta el momento a 488 personas y causado 32 decesos en Bolivia, según el más reciente reporte de las autoridades.
“El número de pruebas que hemos realizado hasta ahora es bajo, estamos priorizando a pacientes con síntomas claros, pero se está implementando diez laboratorios más que permitirán hacer hasta 1.300 pruebas diarias”, dijo Marcelo Navajas.
“Estamos por debajo de la predicción más baja gracias a la cuarentena y si seguimos así, los casos positivos llegarán a 1.942 hasta fines de abril, pero podrían llegar a 2.719 si no se acata la cuarentena”, dijo en rueda de prensa virtual.
El gobierno extendió el encierro hasta el 30 de abril y se cumple en un 70%, según el funcionario.
La restricción ha dado lugar a inusuales formas de comercio de alimentos. Comunidades rurales andinas están regresando al trueque o intercambio de productos en ferias locales para abastecerse de alimentos.
“El trueque está permitiendo diversificar la oferta de productos agrícolas”, comentó Cirilo Pérez, alcalde de la comunidad Tambo Kasa en la sureña provincia de Potosí. La aglomeración de gente en ventas callejeras es lo que más preocupaba a las autoridades por temor a un contagio masivo.
Escasez
En Colombia, el presidente Iván Duque dijo que uno de sus principales objetivos es resolver la escasez de ventiladores mecánicos en los hospitales, prometiendo conseguir centenares a la mayor brevedad. Señaló que en menos de dos meses empresas colombianas fabricarían por los menos 7.000 de ellos.
“Estamos tratando de fortalecer cada vez más la capacidad que tenemos en el país para poder brindar tratamiento de cuidados intensivos”, señaló Duque, cuyo país tenía de momento a 3.621 personas con la infección y 166 habían fallecido por COVID-19.