Santo Domingo.- Al celebrarse el trigésimo aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), la República Dominicana no ha hecho avance alguno en la erradicación del matrimonio infantil y el embarazo adolescente en estas tres décadas, según reconoció este lunes Unicef.
«En embarazo adolescente no hemos logrado prácticamente nada a pesar de los muchos esfuerzos, porque no se ha hecho nada», declaro la vocera de Unicef en el país, Rosa Elcarte.
La vocera puntualizó que el actual Gobierno ha aprobado un «fantástico plan contra el embarazo adolescente, que si los gobiernos siguientes cumplen, tendremos resultados».
Según Elcarte, no fue hasta hace poco que el problema se puso en agenda, llevando a cabo estudios e investigaciones y, por ende, los programas paliativos apenas se han empezado a implementar entre septiembre y octubre de este año.
Unicef y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) presentaron hoy un informe en el que se recoge una reducción mínima en la tasa de fecundidad en adolescentes, que se mantiene en 21,4 % en el país.
Otro de los compromisos que tiene el Gobierno dominicano es la erradicación del matrimonio infantil.
Según la Encuesta Nacional de Hogares de Propósitos Múltiples de 2014, el 36 % de las mujeres de 20 a 24 años afirmaba haberse casado o vivido en unión de pareja antes de los 18 años, y el 12 % antes de los 15 años, cifras que aumentaban entre las más pobres.
«Los planes nacionales contra matrimonio infantil han iniciado ya en las escuelas, se han empezado en este gobierno, pero muy al final».
Entre los lineamientos trazados para la erradicación del matrimonio infantil y embarazo adolescente, Unicef recomienda una reforma de los marcos legales, sensibilización de los hombres en la prevención del casamiento, el empoderamiento de las menores y la permanencia de estas dentro de los sistemas educativos, así como promover el cambio en las actitudes y prácticas en su entorno.
Además de la pobreza, la legislación actual en el país y las pautas culturales y de desigualdad entre hombres y mujeres, favorecen esta dañina práctica.
Es por ello que exhortó a los futuros mandatarios a mantener lo que se ha hecho bien, como se indica en las cifras que aparecen en verde en el informe, y a focalizar los esfuerzos respecto a los problemas que aparecen en rojo.
Otros desafíos planteados en el informe son la mortalidad neonatal, que se mantiene alrededor de 20-23 por cada 1,000 recién nacidos e incrementar la cobertura en los distintos niveles de educación.
Respecto a la violencia en los hogares, en 2014, el 63 % de los niños y niñas menores de 14 años fueron víctimas de violencia física o psicológica, y el 3 % ha sufrido castigos severos.
Persiste también la violencia sexual, que según la Procuraduría General de la República en 2015, casi el 30 % de este tipo de delitos fueron cometidos contra niñas.