SANTO DOMINGO.-El año pasado 1,489 dominicanos fueron diagnosticados con cáncer colorrectal, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y aunque este tipo de mal afecta a las personas en una etapa más avanzada de sus vidas; los médicos están notando una tendencia desconcertante en pacientes más jóvenes.
El doctor Juan Nogueras, cirujano colorrectal de Cleveland Clinic Florida, indica que la edad promedio de diagnóstico ha disminuido de 67 a 63 años.
Además, un número creciente de personas jóvenes, entre 30 y 40 años, están siendo diagnosticados con cáncer rectal.
Nogueras explica que existen algunas posibles razones, pero en la actualidad no hay una respuesta definitiva.
“La teoría es que el cáncer rectal proviene de una acumulación de mutaciones que pueden volverse cancerosas con el paso del tiempo; por lo tanto, se cree que el riesgo de cáncer aumenta con la edad”.
El aumento de la incidencia en pacientes más jóvenes no se debe a la falta de chequeo médico, ya que el Colegio Americano de Gastroenterología recomienda una primera colonoscopia a los 50 años.
“Sabemos que las personas más jóvenes con factores de riesgo genético, enfermedad intestinal inflamatoria o colitis ulcerativa, tienen un mayor riesgo.
Sin embargo, no se han incluido estos grupos de mayor riesgo, así que estos no contribuyen con esta nueva tendencia”, asegura Nogueras.
Afirma que la preocupación es el creciente número de adultos de mediana edad con cáncer rectal que no presentan estos factores de riesgo.
“Lamentablemente, los pacientes más jóvenes y sus médicos pasan por alto los síntomas debido a la edad. Si existe un cambio en los hábitos intestinales, dolor abdominal, sangrado rectal, solicite una colonoscopia a su médico”, aconseja el especialista.
Pronóstico en cada etapa
Realidad. Cuanto más temprano se diagnostique, mejor. En etapas 1 o 2, si el cáncer se limita a la pared del intestino y no se ha extendido a los ganglios linfáticos, más del 90% de los pacientes pueden curarse.
Si avanza a la etapa 3, el cáncer se ha extendido a los ganglios linfáticos y la tasa de curación disminuye a un 67%.
En etapa 4, el cáncer se ha extendido al hígado o los pulmones; únicamente el 10% de estas personas continúan vivos en un periodo de cinco años.