El periódico The New York Times informa que el Gobierno del presidente estadounidense Donald Trump está incrementando su ataque a la ciencia del clima a través del esfuerzo coordinado de múltiples agencias. Según los informes, la Evaluación Nacional del Clima eliminará las proyecciones del peor escenario posible en sus próximos informes, y establecerá un panel de revisión del cambio climático que “cuestionará las conclusiones [de la evaluación]”.
Asimismo, bajo el mando de John Bolton, se le ha indicado al Consejo de Seguridad Nacional que elimine las referencias al cambio climático en discursos y declaraciones públicas, y el Servicio Geológico estadounidense ya no proyectará el impacto del cambio climático hasta el final del siglo, sino que se detendrá en el año 2040.
Uno de los artífices de la política climática establecida por el Gobierno de Trump es William Happer, un conocido negador de la ciencia del clima que en una ocasión comparó la lucha contra el cambio climático con el Holocausto judío, diciendo: “La demonización del dióxido de carbono es como la demonización de los pobres judíos por parte de Hitler”.