Los reaseguradores entran en la temporada de huracanes con sólidas posiciones de capital

Un débil fenómeno El Niño podría darse durante la temporada media de huracanes en el Atlántico este año, según un nuevo informe de Moody's. La agencia detalla que las principales organizaciones meteorológicas han publicado sus previsiones para la temporada de huracanes del Atlántico en 2018, que se extiende oficialmente del 1 de junio al 30 de noviembre.

En general, los expertos predicen que la actividad de tormentas de esta temporada se acercará a los promedios históricos para la Cuenca Atlántica, una región que cubre parte del Océano Atlántico Norte, el Mar Caribe y el Golfo de México. "Las temperaturas más frías que el promedio de la superficie del mar (TSM) en el Atlántico Norte tropical, junto a los fuertes vientos y las presiones sobre el nivel del mar, darán como resultado un El Niño neutro o débil, que podría originarse durante la temporada de huracanes este año”, afirma la agencia.

A lo que añade que, aún así, “los reaseguradores están entrando en la temporada de huracanes con sólidas posiciones de capital para soportar las potenciales pérdidas derivadas de los eventos de huracanes, a pesar de las grandes pérdidas del año pasado".

Sin embargo, Moody's dijo que varios modelos predictivos están mostrando resultados algo divergentes; dependiendo de los períodos de tiempo considerados. Aunque los datos históricos se basan en 30 años, sugieren una probabilidad relativamente alta de una temporada cercana a lo normal (40%) y por encima de lo normal (35%), lo que supone que el modelo basado en 67 años sugiere que la actividad por debajo de lo normal es la más probable, con una probabilidad del 69%, según el Índice ACE.

En promedio, estos pronósticos apuntan a unas 13 tormentas con nombre durante la temporada de 2018, con cerca de seis de estas tormentas convirtiéndose en huracanes, de los cuales tres podrían alcanzar el estatus de huracán mayor. Según los datos ofrecidos por NOAA, en promedio uno o dos huracanes tocan tierra en los Estados Unidos cada temporada.

Dado estas previsiones, desde Moody's se admite que, a pesar de las pérdidas del año pasado, la industria de reaseguros tiene suficiente capital para absorber las pérdidas relacionadas con los huracanes esta temporada. Cabe recordar que los huracanes, en particular Harvey, Irma y María, junto con otros sucesos catastróficos del año pasado, acabaron con la rentabilidad de varias reaseguradoras durante el año y llevaron la rentabilidad del sector a su nivel más bajo desde 2005.

El reaseguro está preparado para las grandes pérdidas

"Sin embargo, los niveles de capital no se vieron afectados de manera significativa, ya que sólo unos pocos reaseguradores de nivel medio se centraron en los negocios de propiedad y los negocios especializados que reportaron disminuciones de capital a finales de 2017", señala el informe. Además, matiza la agencia, varios jugadores aumentaron el tamaño de sus vehículos de capital alternativos, incluyendo fondos e ILS durante los últimos meses de 2017 y el primer trimestre de 2018.

Como resultado, “creemos que nuestros reaseguradores calificados están bien posicionados para manejar grandes pérdidas potenciales por huracanes. Tras uno de los años más caros registrados en cuanto a siniestros catastróficos, los precios del reaseguro de siniestros catastróficos en EE.UU. sólo experimentaron aumentos moderados en las cuentas afectadas por siniestros, suprimidos por la sobreabundancia de la capacidad y la intensa competencia de fuentes alternativas, que pudieron recargarse rápidamente tras los acontecimientos del año pasado", concluye la agencia.

Tampoco los precios han sufrido cambios significativos. Según JLT RE, "Florida es una de las zonas más expuestas a huracanes en los EE.UU. pero, en la zona, las tasas de reaseguro de catástrofes para No Vida aumentaron un 1,2% en promedio en la renovación del 1 de junio de 2018 y se mantienen un 40% por debajo de los niveles de 2012".